Ayer en la cabalgata, el coctel autóctono cumplió un año de descubrimiento. Fue en la cabalgata del año pasado cuando en compañía del Kampu y el MiklesCol, bajo algunos efectos del alcohol, nos dio por mezclar Aguardiente con Guarapo (Jugo de Caña muy helado y limón), con riesgo de un coma diabético se probó, gustó y se quedó. A la fecha ya hay varios que han caído en la red y cada que es posible y hay guarapo disponible (este no se consigue en cualquier esquina por acá) se trata de llevar este a feliz termino subiendo sus grados de alcohol. La combinación con vodka también es excelente pero personalmente prefiero el saborcito a anís que le da el guaro (con ron se intentó y no gustó mucho).
Pa’ la cabalgata de ayer el suministro fueron dos litros y medio de guarapo y una gran cantidad de aguardiente que salía de todas partes, todo estuvo friamente calculado y la prenda estuvo bien vacana.
Al Margen:
La cabalgata como tal estuvo buena, más por lo del ambiente que por los caballos. Se pueden ver caballos (de ambos tipos, a veces uno encima de otro) muy bonitos e imponentes pero siento gran pesar por los que son montados porque a veces abusan y les montan encima toneladas bien sea de equipo (había unos con altavoces gigantes o publicidad) o de carne de marrano.
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