Pensamiento... a futuro

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"El primer paso era desocuparlas, entregar los restos a quienes los reclamaran, y tirar el saldo en la fosa común... Mi primera visión... una larga fila de montículos de huesos...sin más identidad que el hombre escrito a lápiz en una hoja de papel... Allí estaban... un virrey del Perú... un obispo... varias abadesas..."

Del Amor y Otros Demonios - Gabriel García Márquez

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Yo nunca pienso en como me voy a morir ni cuando ("el cuerpo humano no esta hecho para los años que uno podría vivir" op. cit.), pero si en que debería pasar cuando suceda, sea cuando sea, estos son pensamientos un tanto excéntricos que llevo hace rato y algunos de los que me conocen bien lo saben, pero hoy los escribo porque ayer se revolcaron releyendo el citado libro.
Con el segmento citado está claro que no me voy a enterrar en una tumba. Tarde o temprano va a ser profanada o destruida por una almádana, buldózer o lo que sea (una bomba por ejemplo) y solo va a quedar una osamenta de NADIE en manos de cualquiera, sin importar la poca o mucha importancia que pueda alcanzar en vida.
La cremada también está fuera, con las cenizas pasa lo mismo, se vuelven un ornamento inútil de alguien o un pedazo de nada al viento, el asunto poético de las cenizas al viento, al mar, a..., no me llama la atención, me parece un desperdicio, además, el gasto energético de una cremación es vergonzoso.

La opción elegida es la siguiente:

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...y a mi enterradme sin duelo

entre la playa y el cielo

en la ladera de un monte

mas alto que el horizonte

quiero tener buena vista

mi cuerpo será camino

le daré verde a los pinos

y amarillo a la genista...

Mediterráneo - Joan Manuel Serrat

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Obviamente por mi aversión religiosa, me niego a yacer en campo "santo" alguno, lo que quiero es que me tiren a un hueco "en la ladera de un monte", es difícil ser camino y abono a la vez, yo prefiero abono, pero no de pino o genista, yo quiero una ceiba encima. Es ciclo natural y quiero devolver algo, quiero una ceiba porque me gusta, porque es grande, muy grande, en Barranquilla vi una en un parque que era por si sola todo un ecosistema, además, es un árbol que si no le gusta se va pa' otro lado. También simboliza vida y perpetuidad, pues, si bien en la muerte todo se acaba (TODO), lo poquito que queda ayuda a que se levante un arbol que dura y dura mucho, es como una reencarnacion pero de verdad, no de mito.

Es lo que quiero ahora y hace tiempo y aunque creo que legalmente hay problemas, pues si no se hace les jalo las patas por la noche, jeje.